Desde Palio, ubicado en una tierra de cereales, perseguimos nuestra producción “panarra” desde el origen. Obtenemos las harinas biológicas molidas en piedra, aportando frescor al grano y otorgándole el tiempo preciso de maduración, lejos de las harinas blanqueadas y de baja calidad.
En nuestro restaurante elaboramos artesanalmente el pan para gozo y disfrute de nuestros comensales. Estamos trabajando duro en recuperar la cultura del pan que es la nuestra. Toledo, tierra de cereal cuya gastronomía se basa, entre otras materias, en las harinas. No se trata, como nos han hecho ver algunas veces, de que las dietas ricas en pan sean pobres en otros géneros.
Ocaña se encuentra a 62 km de Madrid, es decir, del mayor puerto de mar de España (Mercamadrid), además tenemos muchísima caza, aceites, quesos, azafrán, vinos, leche fresca, huerta de la vega del Tajo que pasa por nuestras tierras, corderos del pueblo, chotos, gallinas, perdiz roja, patos salvajes, codornices… pero también somos ricos en cereales. Por eso en PALIO apostamos por la calidad del PAN elaborado en el restaurante artesano, con fermento casero y largas fermentaciones a temperatura ambiente, sin estufas de fermentación controlada. Nuestros termómetros son las manos.
Las harinas que usamos son de calidad, molidas en horno de piedra, aportando frescor al grano, varietales manchegas de espelta, centeno, trigo sarraceno, arroz, maíz y trigo común. Y siendo tierra de harina, también elaboramos nuestra pasta fresca.
